A fin de atender necesidades muy puntuales o específicas de las empresas que desean llegar o expandirse en la entidad, los inversionistas le están apostando a un nuevo modelo de microparques.
Esta tendencia ha comenzado a tomar fuerza en plazas como Jalisco, pero en Nuevo León no es la excepción, y al menos ya se cuenta con seis espacios de este tipo monitoreados, principalmente en corredores como Escobedo y Apodaca.
En entrevista, expertos detallaron que los microparques generalmente cuentan con módulos desde 400 a 1,000 metros cuadrados.
Su costo promedio en renta fluctúa entre $85 y $95 pesos por metro cuadrado para clase A y en venta un promedio es de $11,000 pesos por metro cuadrado.
El objetivo principal de un microparque es darle suministro y proveeduría a los parques industriales grandes, destacó en entrevista Franz Esteves, director Regional Bajío de Coldwell Banker Commercial.
"El tamaño de bodega es un promedio de 500 metros cuadrados y los micoparques se componen de varias de esas bodegas; por ejemplo, los microparques más pequeños tendrán ocho o 10 (bodegas), y los más grandes alrededor de 100 bodegas", detalló.
El directivo refirió que en el rubro de microparques existen tres tipos de esquemas: el inversionista que ya compró y lo va a rentar a otro, las empresas extranjeras que llegan por primera vez a México con una operación menor y las compañías nacionales que también están arrancando una nueva operación.